Aguas Amazónicas

La Cuenca Amazónica: un recurso global estratégico

La Cuenca Amazónica abarca aproximadamente 5,9 millones de kilómetros cuadrados, representando casi el 40% del territorio total de América del Sur. Este vasto sistema hidrográfico se extiende por ocho países y alberga más de 33 millones de habitantes, convirtiéndolo en una de las regiones más importantes estratégicamente para la estabilidad ambiental global.

Además de su escala impresionante, la Amazonía tiene una importancia estratégica incomparable como la mayor reserva de agua dulce del mundo, conteniendo aproximadamente el 20% del agua dulce disponible en el planeta. Su sistema fluvial genera servicios cruciales de regulación climática, sustenta una biodiversidad extraordinaria y proporciona servicios ecosistémicos esenciales que se extienden mucho más allá de las fronteras regionales.

* En el Proyecto Amazonas se utilizó la delimitación de la Cuenca Amazónica establecida según el método Otto Pfafstetter para la clasificación de cuencas hidrográficas. Por esta razón, los datos de área y población, entre otros, pueden ser divergentes de otros proyectos de la OTCA que utilizan otra delimitación.

Gestión integrada y cooperación regional

La naturaleza transfronteriza de la Cuenca Amazónica exige una cooperación sin precedentes entre los ocho países miembros de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA). La gestión eficaz de los recursos hídricos requiere políticas coordinadas, sistemas de monitoreo compartidos y estrategias de conservación unificadas.

A través de enfoques de gestión integrada, los países pueden enfrentar desafíos comunes, incluyendo adaptación al cambio climático, desarrollo sostenible, conservación de la biodiversidad y distribución equitativa de recursos, respetando la soberanía nacional y los derechos indígenas.

Coordinación Multilateral

Políticas conjuntas y marcos de gobernanza compartidos entre ocho naciones.

Monitoreo integrado

Sistemas unificados de recolección y análisis de datos para recursos hídricos.

Desarrollo sostenible

Equilibrando la conservación con las necesidades de desarrollo socioeconómico.