La Amazonía necesita una economía que genere prosperidad sin destruir el bosque.
El objetivo es impulsar una agenda regional de desarrollo sostenible, basada en el uso responsable de la biodiversidad, la innovación tecnológica y la valorización de los conocimientos tradicionales.
Se busca fortalecer cadenas de valor inclusivas y sostenibles, que garanticen bienestar, soberanía alimentaria y alternativas económicas dignas para las poblaciones amazónicas, siempre en armonía con la conservación de los ecosistemas.








