La cooperación financiera se lleva a cabo en el marco del Proyecto Bioamazonía, que es financiado por el Banco Alemán de Desarrollo (KFW). La OTCA tiene como objetivo reducir las asimetrías entre países y fortalecer la conservación ambiental en los países amazónicos.
A lo largo de 2020, la OTCA destinó USD 1.850.802,07 para la compra de equipos para instituciones gubernamentales en los ocho países amazónicos. Esta es una forma de contribuir al mejoramiento de la infraestructura y equipos de las instituciones a fin de fortalecer los sistemas de información y gestión del conocimiento en los países para la conservación de la naturaleza, especialmente en la Amazonía.
Los países se beneficiaron de adquisiciones para apoyar la investigación, como equipos de laboratorio: microscopios, congeladores, refrigeradores, generadores eléctricos, paneles solares y archivos deslizantes para proteger muestras científicas. Para la operación en campo se adquirieron drones, cámaras, cámaras trampa, GPS y, en algunos casos, embarcaciones pequeñas. También se financió la adquisición de equipos de Tecnología de la Información como servidores, routers, computadoras, laptops, impresoras, escáneres, así como aire acondicionado y humidificadores.
Bolivia recibió equipamiento para fortalecer sus talleres de monitoreo de especies protegidas por la Convención sobre Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). El Museo Nacional de Historia Natural de Bolivia también se beneficiará de computadoras y equipos portátiles y de oficina como escáneres, impresoras, fotocopiadoras, cámaras, proyectores, televisores, drones, entre otros.
En Brasil, un ejemplo de institución beneficiada es el Laboratorio de Productos Forestales (LPF), del Servicio Forestal Brasileño (SFB), que ahora cuenta con un microscopio electrónico y un estereomicroscopio de alta tecnología. El nuevo equipo está ayudando al equipo de LPF a realizar investigaciones y desarrollar un sistema de trazabilidad para las especies de madera brasileñas.
En el caso de Surinam, el monitoreo de los bosques en la región amazónica, donde existen desafíos por la falta de infraestructura adecuada para llegar a estas áreas, se ha realizado con el apoyo de un dron. También se ha entregado equipo informático para apoyar las actividades de conservación de la naturaleza en el país.
En Perú, el Ministerio del Ambiente (MINAM) se benefició con la compra de un dron, laptop y equipo GPS de última generación para las acciones de campo. Para el Ministerio de la Producción (PRODUCE) y el Servicio Nacional de Silvicultura y Vida Silvestre (SERFOR) se adquirieron equipos para fortalecer sus sistemas de trazabilidad.
Soporte técnico
Además del equipo, el Proyecto Bioamazonía está apoyando a los países en la contratación de consultores técnicos para:
- i) desarrollo y mejoramiento de los sistemas nacionales y regional de información sobre biodiversidad y especies CITES mediante la implementación del Observatorio Regional Amazónico (ORA);
- ii) desarrollo, mejora de sistemas electrónicos para la emisión de licencias CITES; y
iii) realización de estudios sobre flora y fauna amazónica, en particular sobre especies amenazadas por el comercio y que están protegidas por la Convención sobre Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora (CITES), para el desarrollo de sistemas de manejo y protección, trazabilidad de estas especies en los ocho países amazónicos signatarios de la Convención.
La dinámica y evolución del mercado ornamental internacional de rayas de agua dulce; un diagnóstico del manejo local de taricayas (Podocnemis unifilis) en el departamento de Loreto, Perú; diagnóstico de orquídeas amazónicas en Ecuador y cumplimiento de las normas CITES para Cedro (Cedrela spp.), especie recientemente incluida en el Apéndice II de esta convención, son algunos ejemplos de estudios que se han desarrollado en países amazónicos con el apoyo de la OTCA a través del Proyecto Bioamazonía.
En 2020, la OTCA generó 134 nuevos puestos de trabajo en consultorías de corto plazo en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela. El monto total de desembolsos por los servicios, que se están realizando a través de 62 contratos de consultoría asciende a USD 1.688.195,22, con pagos previstos hasta el primer semestre de 2021.
La distribución de contratos de consultoría por país fue de 06 en Bolivia, involucrando a 22 personas; 10 firmados en Brasil, involucrando el trabajo de 19 personas; 01 contrato en Colombia beneficiando a 1 persona y 05 en Ecuador beneficiando a 12 personas. En Guyana hubo 07 contratos, beneficiando a 15 personas; en Perú, hay 17 contratos que involucran a 29 personas; y 03 contratos en Surinam, generando 7 empleos. Finalmente, en Venezuela se han firmado 2 contratos, involucrando a 2 personas. La Unidad Ejecutora tuvo 11 contratos firmados, que generaron 27 puestos de trabajo.
Según el coordinador del Proyecto Bioamazonía, Mauro Ruffino, la pandemia Covid-19 afectó fuertemente a todos los países amazónicos y sus poblaciones. Sin embargo, el Proyecto Bioamazonía y las instituciones socias de los países se adaptaron a la situación de emergencia y continuaron realizando el trabajo, incluso con limitaciones y de forma remota. “Fue un año atípico y difícil, pero no nos quedamos inactivos y logramos impulsar los avances necesarios, equipando las instituciones y desarrollando las consultorías. La eficiencia en la gestión y el cumplimiento de las metas permitieron extender el período de ejecución del Proyecto hasta fines de 2022”, dijo Ruffino.
Publicado en el Boletín Bioamazonía, edición n. 7, enero-febrero de 2021.
